Facultad de Derecho
PAMELA JIJÓN (PJ): ¿Cómo describiría la gestión
de residuos en Quito?
CA: En cuanto a ejemplos de gestión adecuada pero
no perfecta, están Cuenca y Lago Agrio, ciudades que
tienen sistemas que incluyen a recicladores/as, que ca-
pacitan a la ciudadanía. En dichos municipios, hace
falta normativa que sancione o incentive a la ciudada-
nía a utilizar correctamente el servicio de recolección
diferenciada. Además, como es un cambio de hábito,
es importante que se mantenga una comunicación
constante a la ciudadanía.
CLAUDIA ANDRADE (CA): Quito es una ciudad
que produce 2200 toneladas de residuos por día, en-
tonces la gestión de la basura es un reto. Quito tiene
dos empresas municipales que se dedican a la reco-
lección y disposición final de residuos, EMASEO y
EMGIRS, respectivamente. Además, debemos recor-
dar que el servicio de recolección y gestión de residuos
es el servicio básico más olvidado por la ciudadanía y
autoridades, por lo que los recursos son muy limitados.
PJ: Pensando en la legislación como marco norma-
tivo al que tienen que sujetarse las administraciones
municipales en la gestión de residuos, ¿la legisla-
ción existente en Quito es suficiente y adecuada?
Con estos antecedentes, creo que la gestión de resi-
duos en Quito no es mala, pero sí desordenada. En las
últimas administraciones municipales, no se ha man-
tenido una visión a largo plazo de cómo brindar este
servicio a los quiteños y quiteñas. Se empezó a conte-
nerizar la ciudad, se invirtió en camiones de carga la-
teral, pero no se realizó una campaña de información
y educación masiva sobre este tema, porque no toda
la ciudad cuenta con este servicio. Como consecuen-
cia de esto, la gente cualquier material en los conte-
nedores, los camiones tenían que hacer más esfuerzos
y se dañaron rápidamente, colapsando el servicio de
recolección de basura. Lo mismo pasó con el proyecto
CA: Más que nueva normativa, hace falta que la que
ya existe se cumpla. Quito tiene ordenanzas intere-
santes relacionadas a la gestión de residuos, que en
teoría obligan a todos los actores a hacerse cargo de
sus residuos. El problema es el seguimiento, control y
sanción. Me imagino que para hacer cumplir la nor-
mativa hay un costo político que seguramente nadie
quiere asumir, entonces todo queda en papel. Ahora
se habla mucho de una ordenanza para la eliminación
de los plásticos de un sólo uso (sorbetes, fundas, cu-
biertos, tarrinas de comida, envases de espuma flex,
vasos) que, si no se controla en la implementación,
lamentablemente quedará archivada, y Quito perderá
una oportunidad de cambiar los hábitos de las perso-
nas y de los comercios en general.
“
Quito a Reciclar”, que sólo se implementó en algu-
nos barrios y acerca del cual no se educó ni comuni-
có bien. Esta falta de compromiso a largo plazo para
continuar con esfuerzos valiosos de la administración
anterior [administración de Augusto Barrera], ha he-
cho que la ciudad retroceda en lo referente a la gestión
de residuos.
PJ: ¿Cómo funciona el reciclaje en Quito? ¿Cuánto
se recicla, cómo se da este proceso, qué participa-
ción tiene la municipalidad?
Quito tiene potencial para ser una ciudad que maneja
correctamente sus residuos, tiene la institucionalidad,
pero le falta revisar las tarifas; tiene la infraestructura,
pero le falta una coordinación entre actores (incluyen-
do a recicladores de base); y tiene una ciudadanía dis-
puesta en su mayoría a actuar por el ambiente o por
los recicladores de base, pero falta educación constan-
te para generar el cambio de hábito.
CA: El reciclaje en Quito es sobre todo fruto de la bue-
na voluntad. A pesar de que las ordenanzas hablan de
la responsabilidad ciudadana en la separación de resi-
duos domiciliarios, ésta no se controla, no se sancio-
na y por ende no se cumple. Tampoco hay una acción
concreta ni de autoridades locales, ni de autoridades
nacionales, para capacitar a la ciudadanía en general
sobre la importancia de la separación de residuos y
el consumo responsable. Entonces, lo que sucede en
Quito es que muy pocas personas hacen el esfuerzo
de separar. Algunas se desaniman porque ven cómo
se mezclan los residuos reciclables con la basura en el
PJ: ¿Existe en el país alguna experiencia que sea
realmente exitosa, una gestión adecuada? ¿En qué
se diferencian estas gestiones de las que se han dado
en Quito?
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CÁLAMO / Revista de Estudios Jurídicos. Quito - Ecuador. Núm. 11 (Julio, 2019): 111-113